La serrería de Puig-reig alerta que la carencia de madera, las dificultades para obtener los permisos para talar árboles y la creciente necesidad de renovar la maquinaria del sector forestal obligan a las empresas a importar los troncos del extranjero, un hecho que pone en peligro hasta un centenar de puestos de trabajo. Así lo publicaban esta semana el diario Regió 7 y el Diari de Girona:
Agricultura estudia ahora la manera de aumentar la línea de ayudas para que los trabajadores forestales puedan tener una mejor maquinaria. A pesar de que Cataluña tiene una gran cantidad de bosques, las serrerías del país no tienen madera para trabajar. Hasta la fecha actual, esta situación les ha obligado a importar 100.000 toneladas de madera del extranjero y, según han asegurado, esto puede comportar la pérdida de hasta 100 puestos de trabajo al sector.
La ingeniera forestal de la serrería Boix, Iolanda Domenjó, cree que esta situación es “muy poco coherente” si se tiene en cuenta el estado de abandono de los bosques catalanes con gran cantidad de masa forestal que crece “de manera descontrolada” y que se podría aprovechar a las serrerías del país.
“La gestión forestal es imprescindible para mantener la salud de nuestros bosques. Cuando hay un incendio todo el mundo se cuestiona si había bastante medios de extinción, pero lo importante es toda la prevención y todo el trabajo que no se ha hecho en el bosque y nadie pide responsabilidades al Departamento de Agricultura de por qué motivo aquel bosque estaba desatendido”, ha denunciado Domenjó.
Según aseguran desde las serrerías, la carencia de madera se produce, principalmente, como consecuencia del hecho que los operarios forestales están trabajando con maquinaria obsoleta que les resta competitividad. En este sentido, piden al Departamento de Agricultura que una parte de los Fondos Europeos de Agricultura se destinen a ayudas y subvenciones para financiar la renovación de la maquinaria forestal, tal como ya se hace en otras comunidades autónomas.
Podéis leer la noticia de manera íntegra (en catalán) en este enlace.